Artículo de opinión
DE RODILLAS Y CON POCAS RESPUESTAS
Por: Vicente Scordamaglia
Imitar el esfuerzo de
un científico para poder observar al mundo desvinculado de los factores
subjetivos. Su fin es mirar al mundo sin pasión ni interés.
El mundo científico avanza como puede (a prueba y error) sin dejar de admitir que por ahora se encuentra de rodillas frente a un virus (covid_19) que muestra cada día ser más letal de lo que se creía y en el mismo orden deja expuesta la fragilidad que tienen las naciones cuando se trata de dar respuestas más o menos efectivas a una enfermedad desconocida que todavía la ciencia no alcanza a catalogar correctamente.
Expresar con precisión en un texto las derivaciones colaterales y o secuelas que todavía están pendientes de estudio, y que solo el tiempo en su transcurso mostrará las consecuencias, nos obliga a pensar lo lejos que estamos de encontrar la solución a la tragedia de la pandemia que desvela a toda la humanidad.
Las controversias que se generan a un lado y otro del mundo científico, político y económico demuestran que todavía la sociedad mundial no está preparada para unirse y promover un primer acuerdo global para dar batalla a un enemigo común que amenaza con dejar a su paso una tragedia humanitaria (con cientos de miles de muertos) sin precedente.
Los medios de comunicación, verdaderos terroristas mediáticos con sus opiniones jugadas por una oposición negadora e irresponsable, contribuyen aun más a la confusión reinante con el solo propósito de desgastar a un gobierno que realiza ingentes esfuerzos para conformar a los distintos sectores de la sociedad en sus “legítimos” reclamos.
No existe fórmula alguna ni vacuna todavía escasa en
todo el planeta, que disipe mágicamente la peste que afecta a todos por igual:
quiere decir esto entonces que la participación de la gente es vital para
frenar la cadena de contagios evitando las actividades de carácter masivo que
son las que mantienen activo al covid, que en su transcurso muta y crea nuevas
cepas complicando aun más la respuesta inmunológica.
Poco cabe decir o hacer más que asumir las
recomendaciones de los especialistas: difundir y distribuir aun con más énfasis
los pocos recursos que hoy se tienen para evitar la propagación del virus, es
tarea prioritaria en una escalada desenfrenada de los negadores que no hacen
otra cosa más que obstruir el camino de cuanta solución proponga o realice el
gobierno nacional, habida cuenta que pretenden usar como consigna de campaña la
pandemia a favor de sus ambiciones políticas y personales.
Ya lo sintetizó magistralmente Antonio Porchia, frase que le
cabe a los opositores argentinos:
“ No ves el río de llantos, porque aun le falta una lágrima
tuya”