martes, 6 de junio de 2017

EN LAS PRÓXIMAS ELECCIONES A LOS CANDIDATOS LOS ELIGE USTED

EN LAS PRÓXIMAS ELECCIONES A LOS CANDIDATOS LOS ELIGE USTED
Las elecciones legislativas del próximo mes de octubre vienen degollando. La puesta en escena entre corruptos, justicia y nuevos carpetazos contra potenciales candidatos hacen las delicias de los medios de comunicación, en especial aquellos programas políticos y de noticias de opinión. (Aunque prácticamente hoy en día casi todos los son).
El travestismo político, a falta de lealtades partidarias, deja sin aliento por su temeridad a aquellos creyentes como yo que consideran que las lealtades personales son un valor irrenunciable a la hora de distinguir entre oportunistas, malandras y corruptos en un ámbito que ya de por sí abunda el culto a las lealtades múltiples; estos son aquellos que se instalan en varios espacios políticos a la vez por las dudas de que alguno de ellos llegue a posiciones de privilegio y eventualmente, estos oscuros saltimbanquis se queden afuera del reparto del poder.
A estos personajes que abundan en los círculos políticos, poco les preocupa lo que le ocurra al país o a su gente, solo están atentos para ver dónde pueden hacer algún negocito que deje alguna rentabilidad para paliar los onerosos gastos que implica moverse en los círculos encumbrados del poder; son tan dañinos para la democracia como carroña para la sociedad ya que llevan y traen información “sensible” vendiendo si es necesario contactos o representaciones de espacios políticos que en verdad no poseen. Sin duda alguna estos personajes son la otra cara de la corrupción porque convierten a la mentira en un valor supremo que la política de hoy consume como el pan de cada día; pero bueno dicen  los más jóvenes “es lo que hay”
Lo cierto es que con estos jugadores la gente tendrá que elegir el próximo seleccionado que nos represente en las dos cámaras, Senadores y Diputados para completar el segundo tramo del mandato del Ing. Macri.
Muchos dirigentes ya vienen posicionados en la opinión pública desde hace un tiempo atrás, constituyéndose así en los futuros candidatos por el derecho otorgado por los votos logrados en las elecciones anteriores, pero otros con menos recursos y menos visibilidad la pelean desde atrás, ambos conllevan un error que a mi juicio disminuye sus chances electorales; los primeros se instituyen como una clase política que oficia como si fueran elegidos por mandato divino, no han aprendido la lección que el pueblo viene enseñando en la consolidación de la democracia y es que la adhesión de la gente  hay que revalidarla en cada elección, no se obtiene en forma perenne y por tanto su representatividad no  dura para siempre; a este núcleo duro los podemos denominar como “la primera línea dirigencial” estos son a priori “los candidatos” (no por ser primera signifique que sean buenos es que partimos para este análisis con los datos que nos dejó el último acto eleccionario) en cambio los que vienen de atrás, trabajan duro para entreverarse en la disputa electoral que se avecina con un error de origen: todas las operaciones que realizan estos grupos emergentes están destinadas a seducir a los candidatos y no a interpretar la problemática de la gente, que es la que en definitiva legítima su autoridad siendo ésta la única propietaria de los votos. Como consecuencia de este mecanismo de roscas que se realiza entre pocos y a espaldas de la gente, los primeros comienzan con el armado potencial de las listas con las que los distintos frentes participan en la contienda electoral, aspirando también los segundos a acceder a algún lugar de privilegio que los impulse hacia posiciones más cercanas al “poder dirigencial”; en ninguno de los dos casos se advierte que realicen una consulta para ver que problemática tiene la gente para plasmar en base a ello proyectos que contemplen esas necesidades. No quisiera creer que la dirigencia actual no conozca el verdadero sentido de la democracia, el pueblo sí sabe de que se trata; por las dudas se las recuerdo:
“La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del pueblo”.
 Juan Domingo Perón.


VICENTE SCORDAMAGLIA