martes, 3 de junio de 2025

 

Milei a la gorra

Con pocas respuestas tangibles girando por el mundo en busca de unos pesos que le de sustentabilidad a su proyecto, la nueva versión democrática de la derecha argentina (que a partir de haber llegado al poder por la vía democrática) se expresa con todas sus virtudes y defectos  incorporado viejas y nuevas mañas de la política llamada por el mismísimo Milei la casta: mientras critica a la vieja casta a su vez, en paralelo, va construyendo una nueva que responde enteramente a su voluntad, que, entre propios y saltinbanquin va sumando aliados, a quienes pide a cambio obediencia  debida esto es: obediencia absoluta al nuevo jefe de la política libertaria; esto se da en el marco del toma y daca en la cámara de diputados y senadores, mediante acuerdos que en su mayoría de las veces nunca se cumplen. Este personaje que irrumpió en la política argentina va construyendo su poder a expensas de debilitar la institucionalidad de la democracia que día tras día es atropellada groseramente por el presidente argentino.   

Este libertario que de la mentira y la extorción está construyendo su fortaleza, pretende que la gente crea en las cifras ridículas y ampulosas de la economía. Dicho esto, es indudable que Milei no solo pretende lograr imponerse en la política nacional, sino que además está logrando un cierto consenso en las derechas que a nivel internacional impulsan medidas similares a las del libertario argentino. Este personaje pretencioso que con su impronta pretende darles un nuevo giro a las derechas del mundo confrontando a las izquierdas que el solo las ve como si fuera un quijote solitario confrontando a los molinos de viento que en su fantasía pretende confrontar liderando un ejército de delirantes para poner patas arriba a un mundo que ya no da respuestas a los múltiples conflictos globales.

Dicho esto digamos que poco se sabe hasta donde llegara el gobierno nacional con estos achiques brutales en contra de los que menos tienen, esto es: reducir el estado nación al límite de lo tolerable creando una planificación en donde solo entran una cuarta parte de la sociedad; utilizando los recursos finitos sobre lo cual están organizadas la mayoría de las economías globales que a su vez están en proceso de cambios profundo que requiere disponer de ingentes recursos económicos y humanos de los cuales el capital financiero cada vez más concentrado  pretende una vez más que el costo de este cambio lo vuelvan a pagar los trabajadores.

Para estar a la altura de los acontecimientos y ser competitivos en el nuevo orden global las naciones tienen que disponer de una estructura que hoy pocos países disponen, como la inteligencia artificial la robótica y otras más sofisticadas en manos de unas pocas naciones, dejando a la mayoría sin ventajas comparativas empujando a la mayoría fuera del juego internacional.  

 como se ve, en este sentido, los grandes jugadores pretenden que el costo del cambio recaiga una vez más sobre el esfuerzo de los trabajadores y los que menos tienen. Los mercados comerciales cada vez se achican al límite de lo tolerable poniendo en peligro y dando un salto al vacío abandonando la estructura sobre la cual está asentada la organización universal del capitalismo financiero. Este nuevo giro que están dando las economías más poderosas, arrasa de un plumazo con la etapa globalizadora que en su corta estadía por este mundo intento imponer un nuevo orden mundial; hoy los gobiernos más poderosos de la tierra en su atropello final barajan ya en sus agendas la posibilidad de utilizar el arsenal nuclear por si fracasan los esfuerzos diplomáticos que de apoco  comienzan ellos también a sufrir el desgaste de una guerra, costosa  y prolongada entre Rusia y Ucrania.

El nuevo orden mundial que presupone debería dejar como saldo mejoras en todos los niveles de la vida de las personas solo está dejando más miseria sacrificio y desamparo para grandes segmentos de la sociedad mundial que impacta de lleno en los países mas pobres. 

La guerra comercial iniciada por las grandes potencias está dejando a las naciones más pobres un triste saldo que recoge las migajas que dejan los poderosos en su devenir diabólico, en su afán de dominar los recursos financieros, los recursos materiales y los recursos humanos que les permita dominar a voluntad la etapa de la robótica la inteligencia artificial y otras que ya están instaladas a disposición de los que más pueden a acceder con facilidad al nuevo orden mundial.

Y para terminar todavía no comprendo muy bien cómo el gobierno todo festeja con tanto énfasis endeudarse cada vez más con los organismos internacionales (FMI) llevando la deuda a cifras escandalosas dejando a la argentina desamparada frente al destino tormentoso que le espera a toda la humanidad.