Milei a la
gorra
Con pocas
respuestas tangibles girando por el mundo en busca de unos pesos que le de
sustentabilidad a su proyecto, la nueva versión democrática de la derecha
argentina (que a partir de haber llegado al poder por la vía democrática) se
expresa con todas sus virtudes y defectos incorporado viejas y nuevas mañas de la
política llamada por el mismísimo Milei la casta: mientras critica a la vieja
casta a su vez, en paralelo, va construyendo una nueva que responde enteramente
a su voluntad, que, entre propios y saltinbanquin va sumando aliados, a quienes
pide a cambio obediencia debida esto es:
obediencia absoluta al nuevo jefe de la política libertaria; esto se da en el
marco del toma y daca en la cámara de diputados y senadores, mediante acuerdos
que en su mayoría de las veces nunca se cumplen. Este personaje que irrumpió en
la política argentina va construyendo su poder a expensas de debilitar la
institucionalidad de la democracia que día tras día es atropellada groseramente
por el presidente argentino.
Este
libertario que de la mentira y la extorción está construyendo su fortaleza,
pretende que la gente crea en las cifras ridículas y ampulosas de la economía. Dicho
esto, es indudable que Milei no solo pretende lograr imponerse en la política nacional,
sino que además está logrando un cierto consenso en las derechas que a nivel
internacional impulsan medidas similares a las del libertario argentino. Este
personaje pretencioso que con su impronta pretende darles un nuevo giro a las
derechas del mundo confrontando a las izquierdas que el solo las ve como si
fuera un quijote solitario confrontando a los molinos de viento que en su
fantasía pretende confrontar liderando un ejército de delirantes para poner patas
arriba a un mundo que ya no da respuestas a los múltiples conflictos globales.
Dicho esto
digamos que poco se sabe hasta donde llegara el gobierno nacional con estos
achiques brutales en contra de los que menos tienen, esto es: reducir el estado
nación al límite de lo tolerable creando una planificación en donde solo entran
una cuarta parte de la sociedad; utilizando los recursos finitos sobre lo cual
están organizadas la mayoría de las economías globales que a su vez están en
proceso de cambios profundo que requiere disponer de ingentes recursos
económicos y humanos de los cuales el capital financiero cada vez más
concentrado pretende una vez más que el
costo de este cambio lo vuelvan a pagar los trabajadores.
Para estar a
la altura de los acontecimientos y ser competitivos en el nuevo orden global
las naciones tienen que disponer de una estructura que hoy pocos países
disponen, como la inteligencia artificial la robótica y otras más sofisticadas en
manos de unas pocas naciones, dejando a la mayoría sin ventajas comparativas empujando
a la mayoría fuera del juego internacional.
como se ve, en este sentido, los grandes
jugadores pretenden que el costo del cambio recaiga una vez más sobre el
esfuerzo de los trabajadores y los que menos tienen. Los mercados comerciales
cada vez se achican al límite de lo tolerable poniendo en peligro y dando un
salto al vacío abandonando la estructura sobre la cual está asentada la organización
universal del capitalismo financiero. Este nuevo giro que están dando las
economías más poderosas, arrasa de un plumazo con la etapa globalizadora que en
su corta estadía por este mundo intento imponer un nuevo orden mundial; hoy los
gobiernos más poderosos de la tierra en su atropello final barajan ya en sus
agendas la posibilidad de utilizar el arsenal nuclear por si fracasan los
esfuerzos diplomáticos que de apoco comienzan
ellos también a sufrir el desgaste de una guerra, costosa y prolongada entre Rusia y Ucrania.
El nuevo
orden mundial que presupone debería dejar como saldo mejoras en todos los
niveles de la vida de las personas solo está dejando más miseria sacrificio y desamparo
para grandes segmentos de la sociedad mundial que impacta de lleno en los
países mas pobres.
La guerra
comercial iniciada por las grandes potencias está dejando a las naciones más
pobres un triste saldo que recoge las migajas que dejan los poderosos en su
devenir diabólico, en su afán de dominar los recursos financieros, los recursos
materiales y los recursos humanos que les permita dominar a voluntad la etapa de
la robótica la inteligencia artificial y otras que ya están instaladas a
disposición de los que más pueden a acceder con facilidad al nuevo orden
mundial.
Y para
terminar todavía no comprendo muy bien cómo el gobierno todo festeja con tanto
énfasis endeudarse cada vez más con los organismos internacionales (FMI)
llevando la deuda a cifras escandalosas dejando a la argentina desamparada
frente al destino tormentoso que le espera a toda la humanidad.