lunes, 11 de agosto de 2025

 MODELOS PARA ARMAR

A juzgar por la intensidad que está tomando la campaña electoral, diríamos que las próximas elecciones (sean estas distritales o nacionales) indicarían que en ellas se juega algo más que el recambio de algunos legisladores en setiembre: diputados senadores y consejeros escolares todo esto en la provincia de buenos aires y en la elección de octubre se sumarian legisladores nacionales estos son: Senadores, diputados y cargos electivos en los distintos distritos de la nación. Pero aquí está el meollo de la cuestión, en el distrito electoral más grande de argentina es donde todos los contendientes aspiran a hacer pie tempranamente ya que en ese distrito se verá la fortaleza de los frentes electorales que disputaran el poder (oficialismo y opositores) ni más ni menos ya que de allí surgirá (así parece)el próximo candidato presidencial.

Pero no solamente se juega en el distrito más grande los votos, sino que allí en ese distrito electoral se juegan los dos modelos de gestión que, en la actualidad ya vienen confrontando, ellos son: Javier Milei y Axel kicillof.

Ambos políticos ya gobiernan y pueden dar testimonio del valor que tienen sus propuestas de cara a las próximas elecciones presidenciales; si esto es así, es de esperar entonces que lo que allí se juega no es ni más ni menos que el futuro de los argentinos por los próximos veinte años. Por lo que a mí respecta los argentinos deberemos votar por uno de los dos modelos que nos representará de cara al futuro, esto es: un plan productivo con pleno empleo y una justa distribución de las riquezas o en su defecto lo que viene llevando adelante este gobierno endeudando cada vez más a los argentinos con tal de que le cierre el déficit fiscal sin importar el sufrimiento de los miles de trabajadores y sus familias impactadas por estas políticas de hambre y miseria. Tenemos en claro que esta hipótesis de trabajo está sujeta a la evolución de los acontecimientos configurando así el contexto en tiempo y forma que es quien valida el texto.

Viendo en perspectiva el desarrollo de los acontecimientos en el mundo y como consecuencia de ello, nuestra nación por más que se arrastre pidiendo algún lugar desde donde tener alguna incidencia en los acontecimientos mundiales no tiene chances de tener ninguna participación que le permita verse entreverado en las naciones que disputan un lugar en el nuevo orden (aunque sea menor) desde donde pedir alguna atención económica más que le permita dar cuenta de los próximos compromisos con el fondo monetario y otros organismos internacionales esto es: seguir mangando y endeudando así, la ya abultada deuda externa, es por ello que solo asistiremos a una serie de bravuconadas y ninguna asistencia que nos permita a los argentinos plantearnos algún proyecto para nuestro futuro y no solo adquirir fondos que en definitiva solo alcanza para pagar intereses de la deuda.

Dicho esto, y en el marco de las tensiones nacionales e internacionales, las fuerzas políticas se aprestan a realizar todo tipo de alianzas para buscar la fórmula que les permita ser competitivos dejando atrás las miserias humanas que suelen ponerse a flor de piel cada vez que el pueblo es llamado a votar.

¿será posible dejar atrás enconos personales? ¿Y egos que solo sirven para prolongar el descredito creciente en el sistema democráticos ¿. Los tiempos políticos se aceleran, la demanda de la gente demanda soluciones con urgencias todos los días en la calle desafiando al ejército montado por la mercenaria Bullrich al servicio del oficialismo solo para reprimir al pueblo todo y para que no se desborde el descontento social con el gobierno y su política de hambre. Solo queda decir a modo de advertencia (decía Perón)

 “cuando los pueblos agotan su paciencia suelen hacer tronar el escarmiento”.    

        

miércoles, 23 de julio de 2025

 

LA UTOPÍA DEMOCRÁTICA

El gran desafío de los argentinos

 

Los acontecimientos que se están produciendo en el país entre oficialistas y opositores, muestra a las claras a una Nación escindida en el nervio más íntimo del ser nacional y anuncia con anticipación el futuro inmediato que está por venir. El descontento del pueblo que a pesar de que todavía se puede expresar por medio del voto democrático (que por ahora solo le preocupa la baja concurrencia para votar) por un lado y la violencia verbal que baja desde el oficialismo por otro cada ves que se ve acorralado descarga toda su ira insultando a diestra y siniestra a oponentes sin importar las consecuencias que ello acarrea; sin embargo y a pesar de la violencia y sospechas de todas las mentiras descaradas que ejercen a diario las usinas del gobierno rubricadas ahora si por el nuevo embajador de los EEUU han puesto a todos los contendientes en alerta máxima ante la posibilidad de que las próximas elecciones nacionales sean manipuladas en favor del oficialismo ante el temor que estos tienen de tener que resolver las elecciones en segundas vueltas electorales.  

En este contexto de creciente conflictividad, (ya que se juega el poder político y económico del cual dependerá el destino de los argentinos por los próximos 20 años) la inmensa mayoría del pueblo argentino, ha comenzado a advertir que no puede permanecer en silencio y ha comenzado a hacerse escuchar mediante manifestaciones callejeras cosa que no le gusta al gobierno  obligándolo a tener que montar a diario un escenario de conflicto social permanente de todos los sectores que conforman la sociedad argentina.

 

En este sentido, nuestro pueblo, sabe mejor que cualquier dirigente, que un gobierno insuficiente de legitimidad no podrá gobernar el próximo período constitucional con la independencia que otorga el mandato popular y en consecuencia, comienza a dar señales para instalar en la agenda electoral la necesidad de generar mecanismos institucionales para consensuar un acuerdo de largo plazo (post electoral) que incluya a todos los  opositores en un gran frente incluyendo a algunos sectores del oficialismo, en un gran acuerdo nacional que garantice la gobernabilidad indispensable para el día después.

Dicho acuerdo se deberá realizar dentro de los plazos electorales que, a pesar del poco tiempo que resta para su finalización, existe aún el margen suficiente para que así, como se unieron para garantizar y proponer una reforma electoral de emergencia que garantice la legitimidad de los próximos comicios, también se podrá garantizar, gane quien gane, las bases necesarias para un futuro gobierno de unidad nacional.

 

Deberían saber a esta altura de los acontecimientos que ni el frente oficialista como así también el frente opositar se irán a su casa el 10 de diciembre y además Cristina desde su calvario pretende ser la gran guardiana de su propio modelo. Ni el oficialismo en el gobierno, ni los opositores según la eventualidad de su suerte en los comicios, podrán por sí solos gobernar los próximos años con la seguridad necesaria que implica avanzar hacia las reformas que requiere nuestra Nación, para que los argentinos estemos prestos para enfrentar los desafíos que implica consolidar una democracia plena con todos sus derechos y obligaciones, que en este caso, le cabe no solo el candidato del oficialismo que estará condicionado por los legisladores opositores. Senadores, Diputados, medios de comunicación (con los recursos que dispongan) junto a los trabajadores y los movimientos sociales con capacidad de ganar la calle permanecen intactos a la hora de defender los derechos adquiridos de manera tal de confluir en una unión de todos los opositores sobre todo aquellos que se vieron perjudicado por las políticas de este gobierno entreguista.  

 

Ahora así: Cualquiera que sea quien nos gobierne correrán con la misma suerte de ser condicionados y obstruidos sin compasión por un animal político que solo sabe alimentarse del poder para seguir subsistiendo.  

 

¿Será posible realizar La Unidad Nacional para garantizar una democracia sana, fuerte y solidaria? ¿O será una falsa utopía más de las tantas que movilizaron a generaciones de argentinos?

La forma en que nuestros dirigentes dilapidan los recursos fundamentales de confianza que le otorga nuestro pueblo a la clase dirigente actual, son producto de una fenomenal miopía con relación a lo que nuestro pueblo viene construyendo sin descanso; con su continuo accionar, paciente pero seguro del destino que desea construir, los argentinos se encaminan a garantizar con su voto la salvaguarda ante todo, del sistema democrático que tanto le costó conseguir; y en este mismo orden no está dispuesto a entregárselo a nadie que no le garantice los derechos fundamentales de vivir en una Nación libre que permita a sus ciudadanos realizarse en su vida con su proyecto personal  junto a su familia en la tierra que lo vio nacer.  

 

 

 

 

 

miércoles, 11 de junio de 2025

 

Artículo de opinión

CRISTINA: UN DESAFÍO HISTORICO

Por Vicente Scordamaglia

Un fenómeno nuevo (y viejo a la vez) se está reproduciendo en la argentina política. Las bases de un gran movimiento nacional y popular comienzan a despertar de su largo letargo. El disparador no es un hecho nuevo ni original, pero si efectivo en su composición; las bases del pueblo sensibles a la suerte que corren sus líderes comienzan a emerger en un peregrinaje por las márgenes de un movimiento que cuando se pone en marcha no respeta autoridad alguna solo obedece a su líder en una profunda armonía con su autoridad única y su sentimiento personal. Irigoyen, Perón, Evita y hoy Cristina son esos lideres que en su singularidad se ven reflejados los intereses de las mayorías que solo se mueven cuando algún peligro excepcional pone en riesgo esa comunión entre el pueblo y las masas populares.   

El fenómeno Cristina tiene todas las connotaciones de convertirse a partir de una injusticia amplificada por los medios de comunicación en un hecho singular pero no único en la historia política argentina. Mucho más cuando su vida corre peligro como es el caso que ocurrió en un burdo intento de asesinato por parte de algún grupo o facción de delirantes creyentes de que eliminando físicamente a la líder o inhabilitarla para que no participe en las próximas elecciones se termina con el movimiento nacional.

El fenómeno Cristina y su relación con la gente tienen connotaciones épicas, qué duda cabe, si no fuera así llegando solo a la razón no alcanzaría, es necesario también llegar al corazón sin ese componente no se podría conducir un movimiento tan complejo como el movimiento nacional justicialista. La información todavía es escasa, las interpretaciones circulan a flor de piel y las hipótesis expuestas todas en la búsqueda de una verdad que quizás nunca la encontremos.

 El peso de la historia nos interpela una vez más, nos pone en la encrucijada de resolver todos los conflictos juntos que nos dividen desde el comienzo de nuestra historia, es ella misma, (nuestra historia) quien nos señala que este es el momento oportuno por donde seguir como consecuencia Cristina  es la única dirigente con capacidad de capitalizar todos los hechos políticos que se suceden en nuestro país, es la única con capacidad y coraje para conducir el momento histórico que vive el país por sobre  los conflictos políticos sociales y económicos, cabe como consecuencia entonces, tomar posición sin dobleces si no queremos (una vez más) quedar atrapados y sin salida en nuestros ásperos y mezquinos intereses que nos pone una vez más en la encrucijada de ser partícipe de la historia que nos demanda acertar sobre nuestras  dediciones.

Las causas que la condenan a cristina son todas armadas con falsedades al punto tal que no encontraron ninguna prueba concreta que la condene, son todas presunciones sobre hechos en las distintas causas que la involucran y esto las bases lo saben manteniéndose alerta ante las consecuencias posibles que devienen de las fragantes mentiras que llevo a la corte suprema a realizar un fallo vergonzoso que pone a la democracia y a la argentina toda al borde de la disolución.                

Consumado el sujeto de la persecución (“Cristina presa”) solo queda esperar que el pueblo se levante ante tanta injusticia.  

 

martes, 3 de junio de 2025

 

Milei a la gorra

Con pocas respuestas tangibles girando por el mundo en busca de unos pesos que le de sustentabilidad a su proyecto, la nueva versión democrática de la derecha argentina (que a partir de haber llegado al poder por la vía democrática) se expresa con todas sus virtudes y defectos  incorporado viejas y nuevas mañas de la política llamada por el mismísimo Milei la casta: mientras critica a la vieja casta a su vez, en paralelo, va construyendo una nueva que responde enteramente a su voluntad, que, entre propios y saltinbanquin va sumando aliados, a quienes pide a cambio obediencia  debida esto es: obediencia absoluta al nuevo jefe de la política libertaria; esto se da en el marco del toma y daca en la cámara de diputados y senadores, mediante acuerdos que en su mayoría de las veces nunca se cumplen. Este personaje que irrumpió en la política argentina va construyendo su poder a expensas de debilitar la institucionalidad de la democracia que día tras día es atropellada groseramente por el presidente argentino.   

Este libertario que de la mentira y la extorción está construyendo su fortaleza, pretende que la gente crea en las cifras ridículas y ampulosas de la economía. Dicho esto, es indudable que Milei no solo pretende lograr imponerse en la política nacional, sino que además está logrando un cierto consenso en las derechas que a nivel internacional impulsan medidas similares a las del libertario argentino. Este personaje pretencioso que con su impronta pretende darles un nuevo giro a las derechas del mundo confrontando a las izquierdas que el solo las ve como si fuera un quijote solitario confrontando a los molinos de viento que en su fantasía pretende confrontar liderando un ejército de delirantes para poner patas arriba a un mundo que ya no da respuestas a los múltiples conflictos globales.

Dicho esto digamos que poco se sabe hasta donde llegara el gobierno nacional con estos achiques brutales en contra de los que menos tienen, esto es: reducir el estado nación al límite de lo tolerable creando una planificación en donde solo entran una cuarta parte de la sociedad; utilizando los recursos finitos sobre lo cual están organizadas la mayoría de las economías globales que a su vez están en proceso de cambios profundo que requiere disponer de ingentes recursos económicos y humanos de los cuales el capital financiero cada vez más concentrado  pretende una vez más que el costo de este cambio lo vuelvan a pagar los trabajadores.

Para estar a la altura de los acontecimientos y ser competitivos en el nuevo orden global las naciones tienen que disponer de una estructura que hoy pocos países disponen, como la inteligencia artificial la robótica y otras más sofisticadas en manos de unas pocas naciones, dejando a la mayoría sin ventajas comparativas empujando a la mayoría fuera del juego internacional.  

 como se ve, en este sentido, los grandes jugadores pretenden que el costo del cambio recaiga una vez más sobre el esfuerzo de los trabajadores y los que menos tienen. Los mercados comerciales cada vez se achican al límite de lo tolerable poniendo en peligro y dando un salto al vacío abandonando la estructura sobre la cual está asentada la organización universal del capitalismo financiero. Este nuevo giro que están dando las economías más poderosas, arrasa de un plumazo con la etapa globalizadora que en su corta estadía por este mundo intento imponer un nuevo orden mundial; hoy los gobiernos más poderosos de la tierra en su atropello final barajan ya en sus agendas la posibilidad de utilizar el arsenal nuclear por si fracasan los esfuerzos diplomáticos que de apoco  comienzan ellos también a sufrir el desgaste de una guerra, costosa  y prolongada entre Rusia y Ucrania.

El nuevo orden mundial que presupone debería dejar como saldo mejoras en todos los niveles de la vida de las personas solo está dejando más miseria sacrificio y desamparo para grandes segmentos de la sociedad mundial que impacta de lleno en los países mas pobres. 

La guerra comercial iniciada por las grandes potencias está dejando a las naciones más pobres un triste saldo que recoge las migajas que dejan los poderosos en su devenir diabólico, en su afán de dominar los recursos financieros, los recursos materiales y los recursos humanos que les permita dominar a voluntad la etapa de la robótica la inteligencia artificial y otras que ya están instaladas a disposición de los que más pueden a acceder con facilidad al nuevo orden mundial.

Y para terminar todavía no comprendo muy bien cómo el gobierno todo festeja con tanto énfasis endeudarse cada vez más con los organismos internacionales (FMI) llevando la deuda a cifras escandalosas dejando a la argentina desamparada frente al destino tormentoso que le espera a toda la humanidad.