martes, 2 de septiembre de 2025

 

UNA CERTEZA Y MUCHOS INTERROGANTES

Es indudable que la disputa presidencial (salteándose un escalón elecciones intermedias) comienza a tomar aspectos definitorios en una alocada aceleración de la campaña política y sus consecuencias. En este sentido, la dirigencia argentina, está mostrando la peor versión de sus propuestas disponibles. Con rostros desencajados que muestran mezquindades en vez de gestos democráticos, devela la poca comprensión que expresa la política acerca de la demanda electoral de los argentinos a la hora de decidir su voto definitivo. La utilización de la descalificación permanente como método  de campaña son los más sucios argumentos para desautorizar al contrincante, (saturando los medios de comunicación y las redes sociales con acusaciones personales) que en el mejor de los casos son verdades a media o en el peor de los casos, infundadas sin pruebas ni fundamento que la justifiquen; son operaciones destinadas a desacreditar a los candidatos de cualquier signo y someterlos a un esfuerzo descomunal para tener que demostrarle al electorado nacional (hipersensible a los temas de corrupción) que no solo cuentan con idoneidad personal para gobernar sino que también poseen una inquebrantable integridad moral frente al complejo mundo del poder de la política y el dinero de las grandes corporaciones que la sustentan. 

Este método de la más baja estatura política, busca igualar para abajo al conjunto de la dirigencia nacional dejando al descubierto miserias y agachadas de nuestra clase política nacional para dejarlos a todos, “en el mismo lodo todos rebolcaos” (como dice Discépolo en Cambalache)

Es evidente que con estas prácticas de hacer política, en donde solo se destacan los defectos por sobre las virtudes de los candidatos, es bastante difícil suponer que lo que dicen pueda ser creído por el electorado nacional, ya que permanentemente se ven arrastrados por las operaciones de los pillos que operan en las sombras y que a río revuelto sacan su mejor dividendo del proceso democrático y su clase política nacional; pero convengamos que si bien no es la mejor calidad democrática la que aspira nuestro pueblo tampoco se la puede calificar de desastrosa (es lo que hay dirían los jóvenes) obsérvese que a pesar de todo ya podemos ver cómo se van alternando en el poder distintas fuerzas políticas y así la  democracia argentina ve a un presidente que llega al final de su mandato y le entrega el mando a otro presidente electo en elecciones libres y democráticas.

 

Los escasos días que restan hasta las próximas elecciones, más que ser la fecha de llegada, comienza a transformarse en la medida de su cercanía, el día de largada; esto es, se termina el relato de campaña y comienza el nuevo ciclo electoral que con sus más y sus menos será el gobierno que los argentinos sabremos darnos, por ahora, con una certeza (continuidad democrática) y muchos interrogantes.

Van quedando así en este escenario político, pocas alternativas para elegir candidato frente a la creciente escalada y embestidas verbales entre quienes serán los protagonistas principales que, finalmente, deberán persuadir al electorado que sus propuestas están destinadas a cambiar (más allá de las cuestiones de fondo que nuestra sociedad demanda con insistencia) definitivamente las reglas de juego que imperan hoy en la democracia argentina; pero debo decir en este punto con un dejo de desconfianza, que con este nivel de violencia y acusaciones sistemáticas, parece ser difícil que así suceda ya que en la mente dirigencial de nuestro país prima  más el impacto que produce la denuncia que la propuesta útil, franca y llana.

Con la importancia que se le da a los carpetazos anónimos, herramienta favorita de estos tiempos, entre políticos mediocres estimulados por los medios de comunicación que solo buscan hacer su negocio, quieren disfrazar las pocas ideas que manejan a la hora de enfrentar los problemas existentes en el ámbito político, social y económico que nuestra sociedad espera se resuelvan en la próxima gestión con nuevos actores  constituyéndose así en un verdadero dilema que deberán resolver los argentinos a la hora de emitir su voto para elegir con libertad de conciencia y sin aprietes psicológicos a sus mejores representantes.

 

La política, es la forma de interpretar los ciclos sociales, políticos y económicos que se producen en un mundo cada vez más globalizado que solo distribuye desde los centros de poder, los desperdicios de un modelo global cada vez más injusto. Con el avance de la tecnología, sus métodos de dominio se han sofisticado extraordinariamente de manera tal que, en vez de que podamos usufructuar los beneficios que produce el mundo global, solo recibamos los desechos de un sistema diseñado para pocos.

La complejidad del mundo, y en especial de los países excluidos del modelo global, requiere rediseñar proyectos alternativos que incluyan al conjunto de los países del mundo globalizado, aplicando para ello conceptos morales elementales de equidad como los expresados en vida por el Papa Francisco, basados en una humanidad cada vez más justa, libre y solidaria.

Estos conceptos olvidados por el hombre de la “modernidad”, están íntimamente relacionados con los procesos democráticos de los países que tienen que lidiar con las peores lacras de nuestro tiempo como son (la corrupción, el narcotráfico, el subdesarrollo y la pobreza extrema pero más aun, lo peor de todos los males, las guerras que la humanidad entera ya debería de haberla hecho desaparecer de la faz de la tierra.

 

Finalmente, en este contexto mundial y hostil para países emergentes nuestro país elige autoridades políticas para el nuevo período (intermedio) gubernamental, consciente de que le espera por delante realizar un supremo esfuerzo para revertir una tendencia propia de nuestra idiosincrasia  que nos pone siempre al límite del conflicto innecesario, por encima del desarrollo de las virtudes personales y colectivas de nuestra nación; la incertidumbre que señalan las encuestas con respecto al resultado electoral, muestran la delicada línea que existe entre el éxito o el fracaso de la próximas autoridades, esto es: que la lucha por el poder entre cualquiera de los candidatos incluyendo al propio Milei será interpelado con los   restos de un gobierno que no se resigna a aceptar que su ciclo histórico es corto y caduca en el mismo instante en que no resuelva los urgentes problemas que tienen los argentinos en su conjunto y arrastre nuevamente a nuestro país a una confrontación sin precedente condenando al atraso y la ignominia a millones de compatriotas que aspiran dejar atrás los viejos conflictos nacionales y construir un destino común que nos contenga a todos por igual.  

 

 

jueves, 28 de agosto de 2025

 

Artículo de Opinión

ARGENTINA UNA REALIDAD FUERA DE CONTROL

Por: Vicente Scordamaglia

 

NIETZCHE:

“Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado”

 

El planeta marcha hoy en día a la velocidad que le imprime las redes digitales. Los instrumentos digitales y las redes son su motor de competición. Argentina no escapa a esa realidad insoslayable, y mucho menos al flujo de las nuevas tendencias que provienen de esa especie de mundo que estamos construyendo, que en todo caso y por las atrocidades que se cometen a diario en todo el mundo, se parece cada vez más a un inframundo propio de un relato de ultratumba de tiempos en que la vida estaba llena de creencias fantasmagóricas que como así hoy, nos impide construir un futuro mejor para todos.

Todo cambio (y esto es inevitable) que se desarrolle en una nación, implica grandes sacrificios para su gente, en especial para los que menos tienen: restructuración de la economía, de los sistemas de producción, reformas políticas, laborales, impositivas y judiciales e institucionales son algunos, entre otros que se me antoja son los pilares de un nuevo modelo de país que se intenta instalar; pero si no se es capaz de poner una red social que contenga los reclamos de las clases desplazadas de la sociedad que el mismo modelo propone, ningún cambio será factible de realizarse si no cuenta con la legitimación necesaria por parte de toda la sociedad.   

 

Mientras en todo el planeta se siente el impacto de la disputa de fondo que están librando los poderosos: carrera armamentista y guerra comercial para ver quién se queda con la hegemonía económica, política y militar del nuevo orden internacional, en nuestro país reñimos por cuestiones mucho más elementales como la de instalar por parte de la oposición una emergencia tarifaria que retrotraiga las tarifas de los servicios básicos (luz, gas, agua y otros) a valores más accesibles para que la gente pueda pagarlos, y no lo que estamos viendo hoy en día facturas con valores exorbitantes que están diezmando la economía de los asalariados en general y sus familias, sembrando una acelerada fatiga de todos los sectores en general, que a partir de un gobierno que se muestra inclemente y voraz por recortar todas las conquistas laborales, atropella obcecadamente con las esperanzas de los trabajadores argentinos y empobrece sin piedad a una clase media  vergonzante que comienza a despertar  tras un letargo temporal que hizo que este gobierno avanzara sin control sobre los derechos de las grandes mayorías.  

A decir verdad, son pocos los que aún confían en los moralizadores de la política, mucho menos en aquellos que se arrogan una autoridad moral que no se sabe bien quien se la ha otorgado, pero si la moral que profesan algunos personajes vinculados con el oficialismo están haciendo la vista obesa por no delatar los focos de corrupción del gobierno actual, y oídos sordos con las prácticas que utilizan para administrar los dineros públicos, en este sentido es poca la diferencia que se observa entre los oficialistas y los opositores.

La popularidad de Milei se agota en la misma medida en que se extingue la credibilidad de la gente; Este gobierno que pretende gobernar a discreción se está poniendo la argentina de sombrero con prácticas autoritarias imponiendo todo aquello que decían, había que cambiar. 

El gobierno nacional comienza a rascar el fondo de la olla, la falta de inversiones significativas que permita la realización de emprendimientos importantes que generen puestos de trabajo de calidad (así decían en la campaña) y con ello retomar el camino de un crecimiento sostenido, comienza a ser en la realidad una quimera inalcanzable.

La imagen patética del presidente Milei con un montaje en derredor de su imagen, comienza a deteriorarse aceleradamente rosando el ridículo, lugar este donde la política no tiene retorno.

 

 

La realidad argentina comienza a recorrer por un sendero peligroso que en la medida de perder rotundamente la iniciativa en las próximas elecciones el gobierno puede ponerse fuera de control con las consabidas consecuencias.

 

Los escasos aumentos que reciben algunos sectores que todavía no paso la motosierra apenas alcanza para cubrir la pérdida adquisitiva de las grandes masas laborales, ya que gran parte de sus magros salarios son utilizados para el pago de servicios, que hoy el gobierno nacional pretende que las provincias corran con el costo político y económico de una medida que se parece más a un manotazo de ahogado que a una medida virtuosa y planificada. Desplazar en las provincias la baja de algunos impuestos para paliar el salvaje ajuste tarifario puede significar un movimiento peligroso como la decisión de un suicida a punto de ejecutar su obra macabra (final).  

A si se encuentra a economía argentina a la caza y la pesca de cuanta caja con plata se encuentre en el camino de su derrotero final tan anunciado.

Los episodios de corrupción que conmueven a la sociedad toda, pone en jaque el plan económico del gobierno que ya se ven las limitaciones de un modelo que deja a las tres cuartas parte de la sociedad por lo que es la muestra palmaria de la extinción de un modelo que solo ve que le sierre las cuentas del déficit fiscal.  

 

lunes, 11 de agosto de 2025

 MODELOS PARA ARMAR

A juzgar por la intensidad que está tomando la campaña electoral, diríamos que las próximas elecciones (sean estas distritales o nacionales) indicarían que en ellas se juega algo más que el recambio de algunos legisladores en setiembre: diputados senadores y consejeros escolares todo esto en la provincia de buenos aires y en la elección de octubre se sumarian legisladores nacionales estos son: Senadores, diputados y cargos electivos en los distintos distritos de la nación. Pero aquí está el meollo de la cuestión, en el distrito electoral más grande de argentina es donde todos los contendientes aspiran a hacer pie tempranamente ya que en ese distrito se verá la fortaleza de los frentes electorales que disputaran el poder (oficialismo y opositores) ni más ni menos ya que de allí surgirá (así parece)el próximo candidato presidencial.

Pero no solamente se juega en el distrito más grande los votos, sino que allí en ese distrito electoral se juegan los dos modelos de gestión que, en la actualidad ya vienen confrontando, ellos son: Javier Milei y Axel kicillof.

Ambos políticos ya gobiernan y pueden dar testimonio del valor que tienen sus propuestas de cara a las próximas elecciones presidenciales; si esto es así, es de esperar entonces que lo que allí se juega no es ni más ni menos que el futuro de los argentinos por los próximos veinte años. Por lo que a mí respecta los argentinos deberemos votar por uno de los dos modelos que nos representará de cara al futuro, esto es: un plan productivo con pleno empleo y una justa distribución de las riquezas o en su defecto lo que viene llevando adelante este gobierno endeudando cada vez más a los argentinos con tal de que le cierre el déficit fiscal sin importar el sufrimiento de los miles de trabajadores y sus familias impactadas por estas políticas de hambre y miseria. Tenemos en claro que esta hipótesis de trabajo está sujeta a la evolución de los acontecimientos configurando así el contexto en tiempo y forma que es quien valida el texto.

Viendo en perspectiva el desarrollo de los acontecimientos en el mundo y como consecuencia de ello, nuestra nación por más que se arrastre pidiendo algún lugar desde donde tener alguna incidencia en los acontecimientos mundiales no tiene chances de tener ninguna participación que le permita verse entreverado en las naciones que disputan un lugar en el nuevo orden (aunque sea menor) desde donde pedir alguna atención económica más que le permita dar cuenta de los próximos compromisos con el fondo monetario y otros organismos internacionales esto es: seguir mangando y endeudando así, la ya abultada deuda externa, es por ello que solo asistiremos a una serie de bravuconadas y ninguna asistencia que nos permita a los argentinos plantearnos algún proyecto para nuestro futuro y no solo adquirir fondos que en definitiva solo alcanza para pagar intereses de la deuda.

Dicho esto, y en el marco de las tensiones nacionales e internacionales, las fuerzas políticas se aprestan a realizar todo tipo de alianzas para buscar la fórmula que les permita ser competitivos dejando atrás las miserias humanas que suelen ponerse a flor de piel cada vez que el pueblo es llamado a votar.

¿será posible dejar atrás enconos personales? ¿Y egos que solo sirven para prolongar el descredito creciente en el sistema democráticos ¿. Los tiempos políticos se aceleran, la demanda de la gente demanda soluciones con urgencias todos los días en la calle desafiando al ejército montado por la mercenaria Bullrich al servicio del oficialismo solo para reprimir al pueblo todo y para que no se desborde el descontento social con el gobierno y su política de hambre. Solo queda decir a modo de advertencia (decía Perón)

 “cuando los pueblos agotan su paciencia suelen hacer tronar el escarmiento”.    

        

miércoles, 23 de julio de 2025

 

LA UTOPÍA DEMOCRÁTICA

El gran desafío de los argentinos

 

Los acontecimientos que se están produciendo en el país entre oficialistas y opositores, muestra a las claras a una Nación escindida en el nervio más íntimo del ser nacional y anuncia con anticipación el futuro inmediato que está por venir. El descontento del pueblo que a pesar de que todavía se puede expresar por medio del voto democrático (que por ahora solo le preocupa la baja concurrencia para votar) por un lado y la violencia verbal que baja desde el oficialismo por otro cada ves que se ve acorralado descarga toda su ira insultando a diestra y siniestra a oponentes sin importar las consecuencias que ello acarrea; sin embargo y a pesar de la violencia y sospechas de todas las mentiras descaradas que ejercen a diario las usinas del gobierno rubricadas ahora si por el nuevo embajador de los EEUU han puesto a todos los contendientes en alerta máxima ante la posibilidad de que las próximas elecciones nacionales sean manipuladas en favor del oficialismo ante el temor que estos tienen de tener que resolver las elecciones en segundas vueltas electorales.  

En este contexto de creciente conflictividad, (ya que se juega el poder político y económico del cual dependerá el destino de los argentinos por los próximos 20 años) la inmensa mayoría del pueblo argentino, ha comenzado a advertir que no puede permanecer en silencio y ha comenzado a hacerse escuchar mediante manifestaciones callejeras cosa que no le gusta al gobierno  obligándolo a tener que montar a diario un escenario de conflicto social permanente de todos los sectores que conforman la sociedad argentina.

 

En este sentido, nuestro pueblo, sabe mejor que cualquier dirigente, que un gobierno insuficiente de legitimidad no podrá gobernar el próximo período constitucional con la independencia que otorga el mandato popular y en consecuencia, comienza a dar señales para instalar en la agenda electoral la necesidad de generar mecanismos institucionales para consensuar un acuerdo de largo plazo (post electoral) que incluya a todos los  opositores en un gran frente incluyendo a algunos sectores del oficialismo, en un gran acuerdo nacional que garantice la gobernabilidad indispensable para el día después.

Dicho acuerdo se deberá realizar dentro de los plazos electorales que, a pesar del poco tiempo que resta para su finalización, existe aún el margen suficiente para que así, como se unieron para garantizar y proponer una reforma electoral de emergencia que garantice la legitimidad de los próximos comicios, también se podrá garantizar, gane quien gane, las bases necesarias para un futuro gobierno de unidad nacional.

 

Deberían saber a esta altura de los acontecimientos que ni el frente oficialista como así también el frente opositar se irán a su casa el 10 de diciembre y además Cristina desde su calvario pretende ser la gran guardiana de su propio modelo. Ni el oficialismo en el gobierno, ni los opositores según la eventualidad de su suerte en los comicios, podrán por sí solos gobernar los próximos años con la seguridad necesaria que implica avanzar hacia las reformas que requiere nuestra Nación, para que los argentinos estemos prestos para enfrentar los desafíos que implica consolidar una democracia plena con todos sus derechos y obligaciones, que en este caso, le cabe no solo el candidato del oficialismo que estará condicionado por los legisladores opositores. Senadores, Diputados, medios de comunicación (con los recursos que dispongan) junto a los trabajadores y los movimientos sociales con capacidad de ganar la calle permanecen intactos a la hora de defender los derechos adquiridos de manera tal de confluir en una unión de todos los opositores sobre todo aquellos que se vieron perjudicado por las políticas de este gobierno entreguista.  

 

Ahora así: Cualquiera que sea quien nos gobierne correrán con la misma suerte de ser condicionados y obstruidos sin compasión por un animal político que solo sabe alimentarse del poder para seguir subsistiendo.  

 

¿Será posible realizar La Unidad Nacional para garantizar una democracia sana, fuerte y solidaria? ¿O será una falsa utopía más de las tantas que movilizaron a generaciones de argentinos?

La forma en que nuestros dirigentes dilapidan los recursos fundamentales de confianza que le otorga nuestro pueblo a la clase dirigente actual, son producto de una fenomenal miopía con relación a lo que nuestro pueblo viene construyendo sin descanso; con su continuo accionar, paciente pero seguro del destino que desea construir, los argentinos se encaminan a garantizar con su voto la salvaguarda ante todo, del sistema democrático que tanto le costó conseguir; y en este mismo orden no está dispuesto a entregárselo a nadie que no le garantice los derechos fundamentales de vivir en una Nación libre que permita a sus ciudadanos realizarse en su vida con su proyecto personal  junto a su familia en la tierra que lo vio nacer.  

 

 

 

 

 

miércoles, 11 de junio de 2025

 

Artículo de opinión

CRISTINA: UN DESAFÍO HISTORICO

Por Vicente Scordamaglia

Un fenómeno nuevo (y viejo a la vez) se está reproduciendo en la argentina política. Las bases de un gran movimiento nacional y popular comienzan a despertar de su largo letargo. El disparador no es un hecho nuevo ni original, pero si efectivo en su composición; las bases del pueblo sensibles a la suerte que corren sus líderes comienzan a emerger en un peregrinaje por las márgenes de un movimiento que cuando se pone en marcha no respeta autoridad alguna solo obedece a su líder en una profunda armonía con su autoridad única y su sentimiento personal. Irigoyen, Perón, Evita y hoy Cristina son esos lideres que en su singularidad se ven reflejados los intereses de las mayorías que solo se mueven cuando algún peligro excepcional pone en riesgo esa comunión entre el pueblo y las masas populares.   

El fenómeno Cristina tiene todas las connotaciones de convertirse a partir de una injusticia amplificada por los medios de comunicación en un hecho singular pero no único en la historia política argentina. Mucho más cuando su vida corre peligro como es el caso que ocurrió en un burdo intento de asesinato por parte de algún grupo o facción de delirantes creyentes de que eliminando físicamente a la líder o inhabilitarla para que no participe en las próximas elecciones se termina con el movimiento nacional.

El fenómeno Cristina y su relación con la gente tienen connotaciones épicas, qué duda cabe, si no fuera así llegando solo a la razón no alcanzaría, es necesario también llegar al corazón sin ese componente no se podría conducir un movimiento tan complejo como el movimiento nacional justicialista. La información todavía es escasa, las interpretaciones circulan a flor de piel y las hipótesis expuestas todas en la búsqueda de una verdad que quizás nunca la encontremos.

 El peso de la historia nos interpela una vez más, nos pone en la encrucijada de resolver todos los conflictos juntos que nos dividen desde el comienzo de nuestra historia, es ella misma, (nuestra historia) quien nos señala que este es el momento oportuno por donde seguir como consecuencia Cristina  es la única dirigente con capacidad de capitalizar todos los hechos políticos que se suceden en nuestro país, es la única con capacidad y coraje para conducir el momento histórico que vive el país por sobre  los conflictos políticos sociales y económicos, cabe como consecuencia entonces, tomar posición sin dobleces si no queremos (una vez más) quedar atrapados y sin salida en nuestros ásperos y mezquinos intereses que nos pone una vez más en la encrucijada de ser partícipe de la historia que nos demanda acertar sobre nuestras  dediciones.

Las causas que la condenan a cristina son todas armadas con falsedades al punto tal que no encontraron ninguna prueba concreta que la condene, son todas presunciones sobre hechos en las distintas causas que la involucran y esto las bases lo saben manteniéndose alerta ante las consecuencias posibles que devienen de las fragantes mentiras que llevo a la corte suprema a realizar un fallo vergonzoso que pone a la democracia y a la argentina toda al borde de la disolución.                

Consumado el sujeto de la persecución (“Cristina presa”) solo queda esperar que el pueblo se levante ante tanta injusticia.  

 

martes, 3 de junio de 2025

 

Milei a la gorra

Con pocas respuestas tangibles girando por el mundo en busca de unos pesos que le de sustentabilidad a su proyecto, la nueva versión democrática de la derecha argentina (que a partir de haber llegado al poder por la vía democrática) se expresa con todas sus virtudes y defectos  incorporado viejas y nuevas mañas de la política llamada por el mismísimo Milei la casta: mientras critica a la vieja casta a su vez, en paralelo, va construyendo una nueva que responde enteramente a su voluntad, que, entre propios y saltinbanquin va sumando aliados, a quienes pide a cambio obediencia  debida esto es: obediencia absoluta al nuevo jefe de la política libertaria; esto se da en el marco del toma y daca en la cámara de diputados y senadores, mediante acuerdos que en su mayoría de las veces nunca se cumplen. Este personaje que irrumpió en la política argentina va construyendo su poder a expensas de debilitar la institucionalidad de la democracia que día tras día es atropellada groseramente por el presidente argentino.   

Este libertario que de la mentira y la extorción está construyendo su fortaleza, pretende que la gente crea en las cifras ridículas y ampulosas de la economía. Dicho esto, es indudable que Milei no solo pretende lograr imponerse en la política nacional, sino que además está logrando un cierto consenso en las derechas que a nivel internacional impulsan medidas similares a las del libertario argentino. Este personaje pretencioso que con su impronta pretende darles un nuevo giro a las derechas del mundo confrontando a las izquierdas que el solo las ve como si fuera un quijote solitario confrontando a los molinos de viento que en su fantasía pretende confrontar liderando un ejército de delirantes para poner patas arriba a un mundo que ya no da respuestas a los múltiples conflictos globales.

Dicho esto digamos que poco se sabe hasta donde llegara el gobierno nacional con estos achiques brutales en contra de los que menos tienen, esto es: reducir el estado nación al límite de lo tolerable creando una planificación en donde solo entran una cuarta parte de la sociedad; utilizando los recursos finitos sobre lo cual están organizadas la mayoría de las economías globales que a su vez están en proceso de cambios profundo que requiere disponer de ingentes recursos económicos y humanos de los cuales el capital financiero cada vez más concentrado  pretende una vez más que el costo de este cambio lo vuelvan a pagar los trabajadores.

Para estar a la altura de los acontecimientos y ser competitivos en el nuevo orden global las naciones tienen que disponer de una estructura que hoy pocos países disponen, como la inteligencia artificial la robótica y otras más sofisticadas en manos de unas pocas naciones, dejando a la mayoría sin ventajas comparativas empujando a la mayoría fuera del juego internacional.  

 como se ve, en este sentido, los grandes jugadores pretenden que el costo del cambio recaiga una vez más sobre el esfuerzo de los trabajadores y los que menos tienen. Los mercados comerciales cada vez se achican al límite de lo tolerable poniendo en peligro y dando un salto al vacío abandonando la estructura sobre la cual está asentada la organización universal del capitalismo financiero. Este nuevo giro que están dando las economías más poderosas, arrasa de un plumazo con la etapa globalizadora que en su corta estadía por este mundo intento imponer un nuevo orden mundial; hoy los gobiernos más poderosos de la tierra en su atropello final barajan ya en sus agendas la posibilidad de utilizar el arsenal nuclear por si fracasan los esfuerzos diplomáticos que de apoco  comienzan ellos también a sufrir el desgaste de una guerra, costosa  y prolongada entre Rusia y Ucrania.

El nuevo orden mundial que presupone debería dejar como saldo mejoras en todos los niveles de la vida de las personas solo está dejando más miseria sacrificio y desamparo para grandes segmentos de la sociedad mundial que impacta de lleno en los países mas pobres. 

La guerra comercial iniciada por las grandes potencias está dejando a las naciones más pobres un triste saldo que recoge las migajas que dejan los poderosos en su devenir diabólico, en su afán de dominar los recursos financieros, los recursos materiales y los recursos humanos que les permita dominar a voluntad la etapa de la robótica la inteligencia artificial y otras que ya están instaladas a disposición de los que más pueden a acceder con facilidad al nuevo orden mundial.

Y para terminar todavía no comprendo muy bien cómo el gobierno todo festeja con tanto énfasis endeudarse cada vez más con los organismos internacionales (FMI) llevando la deuda a cifras escandalosas dejando a la argentina desamparada frente al destino tormentoso que le espera a toda la humanidad.